¿Octava edición de Gran Prix?
"¿Gran Hermano en Telecinco o entrevista morbosa a la niña austriaca en Antena 3?", me preguntaba anoche un amigo por sms. "Gran Hermano, no lo dudes. El primer día es el que más merece la pena".
Transexuales, ex parejas, tríos, habitaciones ocultas, Inma... Gran Hermano se había superado siempre en originalidad y capacidad de sorprender el día de la entrada a la casa, era esperable que se les agotaran las ideas. Ayer, cuando el primer concursante pisó la casa de Guadalix, me di cuenta de que íbamos a ver un nuevo programa del afortunadamente desaparecido Gran Prix y empecé a temer que Ramontxu aparecieran en cualquier momento presentando a "¡¡¡¡la vaquillaaaaa Segismundaaaaa!!!!".
Que no, que el programa no fue ninguna maravilla. Lo que prometía ser la gran novedad de esta edición, un concursante elegido al azar y en directo, resultó ser un sorteo caótico y chanchullero (ya contaré en otra entrada los rumores de tongo que circulan por diferentes foros) con Mercedes Milá gritando "¡¡¡el uno!!!" mientras Lucía Riaño gritaba "¡¡¡el cero!!!".
Respecto a los concursantes, verdadera baza del programa, ninguno me ha sorprendido tanto en la entrada como el año pasado Inma o "la marquesa". Y ninguno de los vídeos de presentación llegaba al nivel del de Raquel, en el que la veíamos tocar el violín por las calles de Málaga (aunque hay que decir que el de la aficionada al manga se la acercaba bastante). En fin, supongo que habrá que darles tiempo. Así, de primeras, creo que personajes como Daniel el pedante, Kiran el irlandés o Mahme la mandona, pueden dar bastante juego.
Lo observaremos de cerca. De momento, yo hoy voy a ver el final del reality que he seguido con más interés esta temporada: El traidor, en Cuatro.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home